¿No te podés resistir a la mirada de tu perro? Te contamos por qué

Si hablamos de "esa" mirada que te hace tu perro y te parece irresistible, seguramente identifiques muy fácilmente a cuál nos referimos: las cejas arqueadas y los ojos abiertos cuando te quiere pedir algo, por ejemplo, esos que te desarman de ternura.

La novedad es que investigaciones recientes indican que ese movimiento muscular es parte de la evolución de las mascotas para relacionarse con nosotros. 

Ojitos de cachorro

Para eso, compararon a los perros domésticos con los lobos, que tienen una musculatura similar en la cara y notaron que los primeros hacían este "gesto" cuando estaban en contacto con los humanos (mucho más, por lo menos, que los lobos). 

Y, al mismo tiempo, descubrieron que los perritos repetían esa mirada enternecedora con mayor frecuencia cuando había un humano cerca que cuando se quedaban solos. 

Selección natural 

Una explicación para los científicos que llevaron a cabo la investigación en la Universidad de Portsmouth es que los perros a lo largo del tiempo descubrieron que esa gestualidad hacía que los humanos sintiéramos deseo de cuidarlos. 

Al mismo tiempo, en su domesticación los humanos parecemos tener preferencia por los perros que hacen esta mirada tan característica (¡y lo comprobamos en casa cada vez que nos la hacen!)

Otra muestra de cómo perros y humanos nos fuimos adaptando y evolucionando en nuestra relación.

Fuentes: NatGeo, Gizmodo.